"La mujer en la vida de Cristóbal Colón"

El Dr. Jesús Varela Marcos durante su exposición

El pasado jueves 23 de marzo de 2017, el Dr. Jesús Varela Marcos dictó una conferencia acerca del papel que jugó la mujer en la vida de Cristóbal Colón. El Dr. Varela comenzó su disertación hablándonos de la madre del descubridor genovés, Susana Fontanarossa, y de su hermana Bianchinetta Colón, de las que apenas tenemos datos biográficos. La primera mujer con la que contrajo matrimonio el Almirante fue con Felipa Moniz de Perestrello en el año 1479. Hija del gobernador de la isla de Porto Santo (Madeira), y fruto de ese matrimonio nació su hijo Diego Colón. Su estancia en Porto Santo, le sirvió a Colón para formarse aún más en los temas de náutica y marinería, gracias a las importantes colecciones que heredó de su suegro, Bartolomeu Perestrello.

Lamentablemente, Felipa Moniz murió cinco años después de su casamiento con Colón, con lo que al genovés no le quedó más remedio que trasladarse a Castilla, donde expuso su proyecto del paso occidental al Catay a la Reina Isabel, a principios del año 1486. Tras desestimarse el proyecto por los Monarcas, Colón se trasladó a la ciudad de Córdoba, donde conoció a Beatriz Enríquez de Arana en 1488, con la que tuvo su segundo hijo, Hernando Colón, tras solo un año después de conocerse. Podemos afirmar que Beatriz Enríquez de Arana fue la única mujer que realmente conquistó el corazón de Cristóbal Colón, debido a que durante sus ausencias dejó a su cargo a su hijo Diego Colón, acudió siempre a visitar a Beatriz en sus momentos de mayor zozobra, y además, el Almirante la dejó dos rentas vitalicias que permitieron a la cordobesa vivir bien el resto de sus días.

La última mujer que se relaciona en la vida del genovés fue Beatriz de Bobadilla Álvarez. En 1488 Bobadilla enviudó de Hernán Peraza, muerto a manos de sus vasallos gomeros, casándose nuevamente en 1498 con el primer Adelantado de Canarias y gobernador de La Palma y Tenerife Alonso Fernández de Lugo. Colón, que había tomado nota de la belleza de Doña Beatriz tras su paso por la corte castellana, quedo enamorado de la gobernadora de la Gomera tras su larga estancia en la isla tras iniciarse el primer viaje. A partir de entonces, Cristóbal Colón volverá a la Gomera después de iniciar la travesía de su segundo y tercer viaje, con la excusa de avituallarse en esta isla canaria, cuando las verdaderas intenciones del Almirante genovés era vivir su amor con Beatriz de Bobadilla.