"La otra versión de la vuelta al mundo. El entramado emprendedor burgalés y norteño"

La Dra. Adelaida Sagarra Gamazo, acompañada de la Dra. León Guerrero, al inicio de la conferencia 

La Dra. Adelaida Sagarra Gamazo dictó una conferencia en el Centro de Estudios de América-Casa Colón de Valladolid con el título: La otra versión de la vuelta al mundo. El entramado burgalés y norteño. En todo momento restó credibilidad a la vieja teoría de que fuera un viaje improvisado. Destacó el importante papel que jugó en todo momento el arzobispo Juan Rodríguez de Fonseca, papel de intermediario con el rey así como de gestor económico de los gastos que se derivarían del viaje, no solo con el mismo rey sino a través de particulares burgaleses acaudalados, en general mercaderes dedicados al gran comercio y financieros, como es el caso de Cristóbal de Haro, quien invirtió casi dos millones de maravedís -la cantidad más alta-, junto a otros pequeños inversores como el tesorero Alonso Gutiérrez de Madrid, Juan de Vozmediano, Nicolás de Artieta y Juan de Fonseca, porque todos ellos estaban interesados en el negocio de las especias, que adquirían hasta entonces en Lisboa. Y por encima de todos destacaba Cristóbal de Haro. Asimismo, en el cuadro de mando, hubo tres burgaleses, Juan de Aranda, encargado de los preparativos de la dotación de los cinco navíos, al estar vinculado a la Casa de la Contratación; Juan de Cartagena y Gonzalo Gómez Espinosa.

La Dra. Sagarra también mencionó al toresano Antonio de Coca, como hombre de confianza de Juan Rodríguez de Fonseca, y a Juan Sebastián Elcano, que ya había trabajado con anterioridad para Cristóbal de Haro. Y junto a ellos había un grupo de vascos. En la armada de la especiería (1519-1522) la Doctora Sagarra habló de los nueve burgaleses, ya citados anteriormente. Gonzalo Gómez de Espinosa y Juan de Cartagena, y junto a ellos Francisco de Espinosa, Pedro Gómez, Jerónimo Guerra, Alonso del Río, Pedro de Valpuesta, Juan de Sagredo y Juan Gómez de Espinosa. Tan solo tres de ellos regresaron en la nao Victoria a Sevilla. La Doctora Adelaida también presentó el itinerario del viaje, varias recreaciones de las cinco naves y algunos detalles de tan largo y complejo trayecto, con un coste en vidas humanas. Dio cifras de la rentabilidad del viaje, con los 510 quintales de clavo de una sola nave que equivalía a diez millones de maravedís. Como consecuencia de tan alto beneficio económico, el rey crea la casa de la Contratación de la Especiería en La Coruña para preparar otros viajes. No faltaron algunas cuestiones de heráldica relacionada como Cristóbal de Haro que se halla en su sepulcro junto a su esposa Catalina de Ayala.

Juan de Maldonado, en su libro Motu Hispaniae (1521-54) dice que los burgaleses eran “los más principales mercaderes entre cuantos se dedican al tráfico y las mercaderías más extrañas pasan de ellos como de una fuente a las demás ciudades…”. Esta cita nos habla de un negocio estable en manos de unas familias especializadas en este comercio. Asimismo, dio una lista de burgaleses en puestos dedicados a la especiería en Centroamérica; es el caso de Ortega de Amador de Lares, Pedro de Merulo, Juan Ortiz de Matienzo o Andrés de Haro, todos entre 1511 a 1520, incluso mercaderes con negocios previos al viaje de Magallanes que negocian por todo el mundo (por ejemplo, Alonso de Salamanca en 1512) y el intento fallido de la creación de una Casa de la Contratación en América (1511). Por ello, el núcleo burgalés de mercaderes vinculado a la empresa ultramarina estuvo activo entre 1508 a 1529 y prestó dinero al rey que compensa con favores: Juan de Castro, Juan de Burgos, Gregorio Polanco, Gregorio de Ayala, Pedro de Polanco y Antonio de Salamanca (Reales Acreedores, de 1524). 

La Doctora cerro su charla con el segundo viaje de García Jofre de Loaysa y Juan Sebastián Elcano que zarpó del puerto de La Coruña el 25 de julio de 1525, asociado con varios personajes burgaleses, Juan de Covarrubias y Juna Mota. Tras 1529, cuando desaparece la Casa de la Contratación de la Especiería, Burgos retrocedió en el protagonismo en el proyecto especiero y por consiguiente del poderío de los mercaderes.